viernes, 22 de noviembre de 2013

AYON CON OPORTUNIDAD EN ATLANTA


NUEVA YORK -- Como el resto de su hermandad en la fraternidad de entrenadores que se están puliendo como entrenadores en jefes por primera vez a nivel NBA, Mike Budenholzer anda buscando en su primeras semanas como utilizar y sacar el mejor desempeño de sus jugadores.

Por otro lado anda Gustavo Ayon, comenzando su tercera temporada mientras que trata de sellar su cupo en la liga tras un verano en el que cargó la selección tricolor durante el Premundial en Venezuela y protagonizó la clasificación de México al Mundial de España 2014. Y aunque han habido rumores de interés a través de clubes en la ACB, Ayón solo le importa finalmente encontrar su puesto en la NBA y sin dudas puede ser en Atlanta.
Solo han pasado dos juegos, sin embargo, el ex asistente y pupilo de Greg Popovich confiaba ya en el mexicano, quién debutó como titular al lado del dominicano Al Horford el pasado viernes tras finalmente estar sano de una lesión en su hombro derecho que le costó las primeras dos semanas de la campaña.
En esos primeros 17 minutos Ayón fue muy activo en la vista del entrenador novato fue exactamente el empuje que Ayón buscaba desde que hizo el brinco de España a los New Orleans Hornets dos temporadas atrás. Y les sirvieron muy bien. La noche siguiente bajo las luces luminosas que alumbran la cancha del Madison Square Garden, ahí andaba su entrenador, llamando su numero. Ayón no decepcionó y lideró el ataque de los reservas, armando una corrida en la que anotó seis puntos al hilo, capturó cuatro rebotes, dos de ellos ofensivos que resultaron en segunda oportunidades para la ofensa y un Ayón que conectaba dominando el interior, pero más importante brindándole a los Hawks una ventaja que nunca vieron desaparecer.
Para Budenholzer, ver a Ayón dentro de la cancha por primera vez durante la campaña regular fue algo excelente pero esa próxima actuación 24 horas después en un rol de reserva le brindo mucha satisfacción.
"(Ha mostrado) su actividad y solamente todas las cosas que hacen a Gustavo una gran parte de nuestro equipo", dijo.
"Gus es un jugador único en como ha llegado a este lugar. A él no le importa si esta jugando en algún lugar en México, en España o en Nueva York, él solamente juega de la misma manera sin tener importancia donde este. Es parte de lo que lo hace a él ser especial. Su energía y ese tipo de competitividad es como contagiosa para nuestro grupo".
La resiliencia del basquetbolista nativo de Tepic y el único mexicano en planteles actuales de la liga lo mantiene optimista mientras trata de no pensar si esta será su última temporada en la NBA.
Ayón andaba coleccionando camisetas de diferente equipos. Vivía la vida de un nómada, en cinco años jugando para ocho equipos en México, Venezuela y España. Lograr el sueño de poder jugar en la NBA no ha sido nada fácil. La lesiones en Nueva Orleans le dieron la oportunidad de titular en la recta final de su primer año e hizo un buen papel, con un balance de 8.3 puntos y 6.4 rebotes en 24 juegos de una temporada abreviada por causa del paro laboral. El traspaso a Orlando donde inició su segundo año lo vio batallando con dos lesiones y cuando jugaba, su intento era dejarlo todo en la cancha en los muy pocos minutos que les daban mientras que el montenegrino Nikola Vucevic cumplía todas las expectativas del Magic. Eso resultó en Ayón ser una pieza de más en el plantel y ser incluido en un canje junto a J.J Redick hacía Milwaukee donde casi no corrió en la pista.
"Si sigo así, caminare con toda la NBA en menos de lo que canta un gallo", bromeaba Ayón.
Si esa etapa no le robó su confianza, ¿que lo hará?
"(Fueron) unos momentos difíciles. Son cosas que pasan", afirmó.
Ahora reconoce su puesto con los Hawks, respaldando a Horford y Paul Millsap y hasta la posibilidad de que todos estén en la cancha a la misma vez si Budenholzer opta por una alineación grande en diferente periodos del partido. Por fin, feliz se encuentra el nayarita en una situación donde pueda aportar de un día al próximo sin tener que preocuparse la posibilidad de pasar la noche en la banca semana tras semana.
"Son grandisimos jugadores. Es una situación totalmente diferente a las anteriores, las situación de Nueva Orleans y Orlando, porque este equipo tiene gente para más", mencionó.
"El equipo de New Orleans, estaban pensando y ya era diciembre, estaban pensando en que numero del draft iban a tomar. Ahora este equipo esta pensando fuerte en los playoffs y es un equipo importante en la liga".
Budenholzer duró 19 años, 17 como asistente, junto a Popovich, unos de los mejores entrenadores que han pasado por la historia de la NBA, un entrenador que ha sabido como sacar lo mejor de hasta el último jugador sentado en la banca.
Junto a Budenholzer, ahora Ayón tiene una oportunidad que quizás nunca se le había presentado si los Bucks no lo habían colocado en la lista de waivers.
"La NBA sabemos que es de oportunidades. Te dan la oportunidad y (hay que) aprovecharla y estar preparado para tomarla al cien por ciento con todas las ganas que se deben", concluyó.